Es una moda que cada día se va expandiendo más. Al parecer,
los grandes chefs del mundo sienten delirio por ello y los famosos que están a
la última solo quieren comer así. Nos estamos refiriendo a comer los alimentos
crudos.
Esa moda procede del mundo vegetariano. Ya sabéis que las
personas que siguen esta dieta solo toman verduras y frutas, pero este tipo de
alimentación entraña algunos riesgos para la salud derivados de la falta de
algunas vitaminas y otros elementos esenciales para el correcto funcionamiento
de nuestro cuerpo. A raíz de esto surgieron los llamados “crudívoros” (Raw Food).
Los pertenecientes a esto último grupo, aparte de los
vegetales que suponen la base de su alimentación, también comen pescado, carne
y lácteos aunque, eso si, sin cocinar o, como mucho, cocinados a una
temperatura inferior a los 48 grados. Los seguidores de esa corriente
alimenticia afirman que el hombre pasó millones de años comiendo crudo hasta
que descubrió el fuego y que nuestro organismo no está preparado para ello.
Además, afirman que el calor desnaturaliza las proteínas, destruye las
vitaminas y concentra los pesticidas. Sus detractores justifican sus críticas afirmando
que cocinar los alimentos produce una pérdida pequeña de vitaminas y de sales
minerales, pero, en contrapartida, esteriliza los alimentos.
¿Qué ventajas tiene?
- La mayoría de las vitaminas de las verduras sólo se
mantienen si no están cocinadas. Cocer, freír o rehogar es perder.
-Comer crudo adelgaza porque, cuanto más cocinado está un
alimento, más se eleva su índice glucémico y desaparece su capacidad saciante.
- Ayuda con los problemas de colesterol puesto que la mayoría
de los alimentos crudos no tienen grasas saturadas.
¿Tiene algún inconveniente?
- Los alimentos sin cocinar deben tener una calidad extra.
Por lo tanto, resultaran más caros.
- Al aparato digestivo le cuesta más trabajo asimilar
alimentos crudos; por ello, las personas con problemas intestinales no deben
seguir esta forma de comer. Tampoco resulta muy conveniente que los niños se alimenten
de esta forma por el mismo motivo.
- Tanto el pato (causa infección intestinal) como los huevos
han de cocinarse obligatoriamente.
- Algunos microorganismos y bacterias solo se pueden eliminar
con la cocción y el resto de la comida se debe lavar profusamente, incluso
añadiéndole un par de gotas de lejía, aclarándola después.
En fin, que cada uno elija lo que prefiera, aunque dejadme
que os dé un consejo: si elegís esta opción hacedlo en vuestra casa, con
alimentos comprados por vosotros de alta calidad o en bares o restaurantes de
total confianza. Si no os fiáis, vale la pena saltarse por un día la dieta
antes que caer enfermos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario